Con motivo de la dimisión de José Manuel Pérez Tornero como presidente de Radiotelevisión Española (RTVE), la Red de Colegios Profesionales de Periodistas quiere recordar que los medios públicos deben regirse por los principios de calidad, profesionalidad, independencia, pluralidad y viabilidad, y sobre todos ellos deben realizarse tanto la elección de la presidencia como todas las decisiones del nuevo mandato.
En diciembre de 2018, la Red de Colegios lanzaba su Manifiesto sobre los medios de comunicación públicos, en el que, al tiempo que se destacaba que son una herramienta imprescindible para garantizar el acceso universal a la información, se apuntaban algunas medidas necesarias para que esta sea de calidad, plural e independiente. Los criterios expuestos entonces continúan siendo válidos y necesarios ante la situación actual de RTVE.
En concreto, los medios públicos deben estar dirigidos por personas con criterios estrictamente profesionales, elegidas por un concurso de méritos abierto y transparente, y no por el mercadeo entre partidos. Su actividad debe quedar al margen de presiones políticas, económicas o empresariales, para actuar únicamente por el interés de la ciudadanía. Para garantizar esta profesionalidad e independencia, es importante la participación del Consejo de Informativos y otros órganos profesionales en el desarrollo de la actividad mediática.
La búsqueda permanente de la excelencia y la realización de contenidos dirigidos, sin exclusión, a toda la población han de ser también motores de la programación de estos medios. Una vez más, la independencia y la profesionalidad son las mejores garantías de esta calidad y pluralismo. Recordamos también la necesidad de que los medios públicos se doten de recursos económicos suficientes para responder a la misión de servicio que tienen encomendada, así como de medidas para incorporar la perspectiva de género y asegurar la igualdad como principio básico.
Por todo ello, la Red de Colegios Profesionales de Periodistas reclama que estos principios sean los pilares sobre los que se realice la elección de la nueva presidencia de RTVE, así como su actividad futura. Resultaría incomprensible renunciar una vez más a la construcción de los medios públicos que merece la sociedad española. El modelo del control político y los cargos partidarios ya mostraron demasiadas veces en el pasado su fracaso tanto a nivel informativo como de viabilidad.